viernes, 22 de mayo de 2009

EGIPTO. LA PIRÁMIDE



Por encima de la mastaba, en cuanto a magnificencia, se encuentra la pirámide. El tamaño colosal de los edificios egipcios tiene su clímax en esta simple figura geométrica de tamaño descomunal. Tamaño que busca expresar la idea de superioridad. Las enormes proporciones de un elemento tan básico en la geometría (la pirámide) hace que ésta adquiera, si cabe, mayor magnificencia. Está concebida bajo un artificio numérico que sólo los arquitectos egipcios conocían. El número y la medida, no sólo en Egipto sino en todo el mundo clásico, tenían significado religioso y místico (véase la escuela pitagórica).
Pero, además, tiene un valor simbólico. Es símbolo de Ra, dios sol, en su momento de esplendor diurno (las aristas de las pirámides eran como rayos del astro divino que caen sobre la tierra, por lo que solían cubrirse con bloques de piedra caliza blanca. Ese simbolismo es esencial en el mundo egipcio, ya que viene a reflejar sus creencias en la otra vida, pues Ra, el Sol, la Luz Divina se halla por encima de la muerte, del sarcófago.



Este edificio no tiene fachadas, ni pórticos ni nada parecido puesto que su función es la de guardar los restos del faraón junto a sus pertenencias, y hasta en aquel entonces los hombres sospechaban de los hombres. Ya se asaltaban tumbas, por lo que se colocaban trampas, falsas puertas, se cegaba el corredor después del entierro.

Las más importantes son las de la planicie de Gizeh, las pirámides de Keops, Kefren y Mikerinos. La de Keops mide 145 metros de altura. En cambio las pirámides de Abusir, construidas bajo los faraones de la V dinastía, manifiestan ya la decadencia de estos monumentos, con lo que empieza una nueva moda: el hipogeo (que se excava en los acantilados próximos al Nilo.

En palabras de Herodoto tenemos la primera constancia de un extranjero hablando de la pirámide de Keops

En cuanto a la pirámide, se gastaron en su construcción veinte años: es una fábrica cuadrada de ocho pletros de largo en cada uno de sus lados, y otros tantos de altura, de piedra labrada y ajustada perfectamente, y construida de piezas tan grandes, que ninguna baja de treinta pies.

La pirámide fue edificándose de modo que en ella quedasen unas gradas o poyos que algunos llaman escalas y otros altares.

Hecha así desde el principio la parte inferior, iban levantándose y subiendo las piedras, ya labradas, con cierta máquina formada de maderos cortos que, alzándolas desde el suelo, las ponía en el primer orden de gradas, desde el cual con otra máquina que en él tenían prevenida las subían al segundo orden, donde las cargaban sobre otra máquina semejante, prosiguiendo así en subirlas, pues parece que cuantos eran los órdenes de gradas, tantas eran en número las máquinas, o quizá no siendo más que una fácilmente transportable, la irían mudando de grada en grada, cada vez que la descargasen de la piedra; que bueno es dar de todo diversas explicaciones. Así es que la fachada empezó a pulirse por arriba, bajando después consecutivamente, de modo que la parte inferior, que estribaba en el mismo suelo, fue la postrera en recibir la última mano.
En la pirámide está notado con letras egipcias cuánto se gastó en rábanos, en cebollas y en ajos para el consumo de peones y oficiales; y me acuerdo muy bien que al leérmelo el intérprete me dijo que la cuenta ascendía a 4.600 talentos de plata. Y si esto es así, ¿a cuánto diremos que subiría el gasto de herramientas para trabajar, y de víveres y vestidos para los obreros, y más teniendo en cuenta, no sólo el tiempo mencionado que gastaron en la fábrica de tales obras, sino también aquel, y a mi entender debió ser muy largo, que emplearían así en cortar la piedra como en abrir la excavación subterránea?






FALSOS MITOS

1. Un mito del Cine es que las pirámides las hicieron los esclavos, cuando eso es mentira. Las piedras pudieron extraerlas, aunque se duda, ya que era una tumba sagrada, en la que enterrarían al sagrado hijo de Ra, por lo que sólo debían construirla los creyentes (lugar sacro=lugar puro). Los esclavos ya tenían bastante con otras cosas, y de construir, construirían ciudades, no lugares sacros. Los que construían las pirámides lo hacían a cambio de que, en el más allá, este dios mortal hablara en favor de ellos en el día del juicio y pudiera alcanzar la vida eterna.

2. Tampoco tienen esos amplios pasillos ni nada por el estilo. El pasillo es estrecho, claustrofóbico para quien padece de esta enfermedad... e incluso para quien no, y muy, muy empinado. (nada que ver con lo que sale en las películas), y la cámara no es grande, ni mucho menos (creo recordar que la de Kefren no llegaba a los 50 m2 .)

3. Las pirámides están construidas con bloques exactamente iguales. Este es un mito muy típico, insuflado fundamentalmente por sectas ("movimiento gnostico", "nueva acrópolis", etc, que quieren justificar que las construyeron los Atlantes antes de que existieran los egipcios y que ya volaban, conocían la energía nuclear y otra serie de portentos de esos seres superiores.); por los egipcios (que así generan más morbo y logran más turistas) y por algunos más (quienes hablan de que fueron echos por extraterrestres, etc -me encanta Stargate, pero sé que es una película.) En Gizeth visité las pirámides y subiendo me di cuenta de que, si el primer bloque medía, aproximadamente 1,5m, el segundo medía algo menos y el cuarto probablemente rondaba ya el 1,40m (de alto, se entiende).

4. Relacionado con el punto 3, y citando la wikipedia, sin que sirva de precedente:
La gran pirámide en la cultura popular moderna [editar]

La construcción de la gran pirámide y las supuestas relaciones métricas que presenta han sido objeto en los últimos tiempos de numerosas hipótesis, generalmente sin excesivo rigor científico. Una de las más conocidas –y esgrimidas por el mundo esotérico– es la asociación de la altura original de la pirámide como fracción de la distancia de la Tierra al Sol.[10] [11] Dicha construcción ha sido atribuida a extraterrestres, atlantes, egipcios anteriores a Keops o a otras culturas o civilizaciones desconocidas.

Dichas teorías han tenido repercusión en internet, donde pueden encontrarse algunas de ellas realmente extravagantes, en revistas, libros y en el mundo del cine, con películas como Stargate o 10.000, donde se atribuye la construcción a extraterrestres o a una civilización desconocida de hace 10.000 años, respectivamente

EGIPTO. LAS MASTABAS





El Imperio Antiguo (ca. 2800-2052 a.C.)

Es considerado el primer período clásico de la arquitectura egipcia. La capital es Menfis y los monumentos principales son los enterramientos.
El más antiguo es la mastaba (especie de tronco de pirámide rectangular, como la del rey Menes)



El interior de las mastabas se repartía en diferentes espacios: al entrar, nos encontramos con una capilla para las ofrendas, ya que la familia, los amigos y los deudos (aquellos que le debían algo: esclavos, deudores, clientes...) debían ayudar a proveer al muerto en su peregrinaje a la otra vida, al más allá. Se seguía por un pozo hasta el "serdab", una sala que contenía pinturas, relieves y esculturas alusivas al muerto. Allí estaba el "doble" del difunto. Una imagen de él que, al ser una estatua se conservaba mucho mejor que el difunto, por lo que garantizaba la vida de ultratumba (es como si la estatua fuese su imagen en el más allá, es su sustento). Detrás de esa sala mediante otro pozo se llega a la sala del sarcófago, donde se encuentra el cuerpo del difunto. Las entradas a éste se sellaban para asegurar su inviolabilidad.



La mastaba era el tipo más corriente de sepultura durante la época menfita. Era la sepultura propia de gente de noble estrato y adinerada. Suelen formar calles, formando ciudades de muertos.